Medir la presión arterial puede parecer un proceso hasta cierto punto sencillo de hacer, pero ¿sabías que existen factores que pueden provocar una mala medición? En este blog te diremos cuales son y cómo evitarlos.
Según datos de la OMS
“Alrededor de 1130 millones de personas en el mundo parecen hipertensión, es decir una séptima parte de la población mundial, está en riesgo de sufrir algún evento cardiovascular”
Por ello una medición correcta, cambios de rutina y un seguimiento médico correcto, podrán ayudar a reducir el número de personas que sufren de esta enfermedad, llamada “El asesino silencioso”.
Como ya sabemos, existen dos tipos de monitores de presión arterial, los llamados de brazo y los de muñeca, por lo cual cabe aclarar que los factores a evitar son los mismos para ambos tipos.
Estar estresado durante la medición:
Se recomienda tomar la medición en un estado de cero nerviosismo, no encontrarse alterado, emocionado o enojado y mucho menos después de haber hecho alguna actividad física, ya que esto arrojara medición sumamente altas.
Evite tomar café o té:
Tomar alguna de estas bebidas afectará deforma significativa la medición, ya que son estimulantes, tampoco se recomiendo medirse la presión justo después de comer.
La posición del brazo:
El brazo donde se coloca el tensiómetro debe quedar libre de presión, debe estar apoyado en un mesa o superficie similar ala altura del corazón.
Mediciones a la misma hora:
Se recomienda hacer la medición todos los días siempre a la misma hora, ya que los valores cambian a lo largo del día.
¡SHHHH!:
Se recomienda no hablar durante la medición, ya que el movimiento muscular de garganta, tórax y boca puede alterar la misma.
Tomate tu tiempo:
Puedes hacer hasta 3 mediciones continuas con al menos uno o dos minutos de diferencia.
Recuerda
Una alimentación sana, un bajo consumo de sal, dejar de fumar y hacer ejercicio con frecuencia puede ayudarte a mantener tu presión arterial de manera correcta, así mismo una medición correcta y fiable evitará valores erróneos y por ende malos diagnósticos médicos.
¡Haz más grande la vida!
